viernes, 20 de noviembre de 2009

Maese Trotamundos

De Javier Villafañe, Grassa Toro ha elegido este fragmento del cuento El metal y la madera dentro del libro titulado Maese Trotamundos por los caminos de Don Quijote, que a su vez se encuentra en la exposición Leer a Javier Villafañe, que La Cala (Casa Abierta La Andariega) en Chodes- Zaragoza ofrece a los lectores y que pertenecerá abierta hasta el 22 de diciembre de 2009.


El Metal y la Madera
(Fragmento)
Juan I: A eso voy, al ladrillo. Porque el ladrillo es la pared. Pero siempre hablan de un oficio los que espían sin ensuciarse las manos, sin conocer el oficio
Juan II: Los que espían sin mostrar la cara, sin pisar la tierra con los pies. Y viven, comen del oficio que espían. ¿Me explico?
Actor: (Bebiendo) Perfectamente.
Juan II: (Bebiendo) Entonces sigo hablando. Un pintor pinta. Un crítico juzga. El pintor no vende un cuadro; pero el crítico no sólo se queda con un cuadro del pintor y que después lo vende, sino que además cobra por el comentario que escribe. Hay que matar a los críticos. ¡Pin! ¡Pun! ¡Pan! ¿Por qué no continuaron siendo lo que eran? ¿Por qué no empezaron por ser alguien? La culpa la tienen las universidades que hacen doctores para todo. Doctores en filosofía y usan cuello duro. Doctores en música y son sordos. Doctores en Artes Visuales y usan anteojos. Doctores en letras y usan diccionarios. A todos ellos: ¡Pin! ¡Pan! ¡Pun! Hay que terminar con esa plaga para salvar el teatro, la pintura, y la poesía, la música, la vida. ¿De acuerdo?
Actor: Totalmente de acuerdo.
Juan I: Mañana van a aparecer doctores para enseñar a volar a los pájaros y a nadar a los peces.
Juan II: A ese congreso internacional de Titiriteros, ¿Por qué no fuimos invitados nosotros, los titiriteros que vamos de plaza en plaza, de feria en feria, los que amamos los títeres, los que conocemos el oficio desde la punta del pie hasta los cinco dedos de la mano? Nosotros los que llevamos el teatro a cuestas con un callo en los hombros. ¿Qué hacían allí doctores, sicoanalistas, críticos? A todos ellos: ¡Pin! ¡Pun! ¡Pan!
Maese trotamundos por el camino de Don Quijote, 1983



como aportación